SOMOS MÁS RESPONSABLES DEL CLIMA DE LO QUE PENSAMOS
Tan solo hace un par de días los habitantes de Ciudad Mutis y otros corregimientos como El Valle sufrían una fuerte escasez de agua debido al inclemente verano producido por el fenómeno del niño en Colombia.
Según relatan varias personas que viven hace más de 25 años en este municipio, que las quebradas que abastecen del preciado líquido a la comunidad desaparecieran por completo, era algo que no habían visto nunca en ese tiempo, sin importar qué tan intensa fuera la sequía.
Así pues, las imágenes de lo que antes era un río (proveniente del Salto del aeropuerto) con un considerable caudal, se convirtieron en una trocha llena de piedras y ramas secas donde el agua dejó de circular; un panorama triste que evidencia que el clima cada vez nos afecta más.
Al parecer, con las lluvias que han caído en los últimos días la temporada de invierno se avecina y ahora los estragos los ocasionan las inundaciones y las crecidas de los mismos ríos, lo que nos obliga a hacer las siguientes reflexiones:
¿Qué tanta responsabilidad tenemos los seres humanos en esta situación? ¿entendemos la importancia de no talar árboles cerca de las cuencas, nacimientos de agua y las riberas? ¿Cómo no se van a secar los ríos,(de donde sale el agua que consumimos) si hacemos quemas indiscriminadas, arrojamos basuras que taponan y/o contaminan las fuentes de agua? Y no solo en los tiempos de sequía los árboles hacen un buen trabajo protegiendo estos acuíferos, cuando el agua es demasiada ( por constantes lluvias) también tienen un papel fundamental:
las raices amarran la tierra y eso hace que los deslizamientos sean menos, ayudan a los procesos de infiltración y en la escorrentía (flujo de agua) de la tierra: a mayor alteración de las capas naturales, mayores escorrentías y mayor riesgo de inundaciones.
Las emergencias han comenzado no solo en la cebecera municipal sino también en El Valle, donde hace dos días hubo un fuerte aguacero que dejó a varias familias afectadas, que ya están siendo atendidas, sin embargo, sería bueno pensar un poco más allá del simple clima y tomar conciencia de las acciones que estamos tomando o podemos tomar.
